Claudia Rodríguez
Acta Pública
Los señalamientos del riesgo de sobre endeudamiento en los hogares de bajos ingresos por créditos a nómina y préstamos, la alerta de deuda de las empresas sobre todo las Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes) de las que a advertido el gobernador del Banco de México (Banxico), el posible aumento de las tasas de interés a cargo de la Federal Reserve System (Fed) que impactarían sin duda en el mercado cambiario, la liquidez de las finanzas y reservas del Gobierno federal que cada vez se hacen más astringentes; son la fórmula perfecta para que el país y los mexicanos se enfrenten en los próximos meses a un escenario adverso de su economía.
Suena falso, hueco y fastidioso el discurso gubernamental que señala una y otra vez con indistintos actores, que las reformas estructurales de la Administración de Peña Nieto son las vías únicas e ideales que nos sacarán del marasmo nacional.
Banxico pone en la mira dos riesgos latentes que podrían poner en jaque el consumo interno y el movimiento de líquido en el país: deuda de familias impagables por concepto de préstamos con cargo a nómina y el endeudamiento de las empresas privadas no financieras que ha ido en aumento de manera significativa y de la adversidad a la que muchas pueden enfrentarse en caso de que su fuente de ingreso tenga rentabilidad a partir de la moneda extranjera.
No son reales las proyecciones discursivas gubernamentales que vociferan que México está en condiciones imparables de prosperar, cuando en verdad el escenario nos proyecta a profundidades casi imposibles de remontar.
El propio Banxico ya ha optado por advertir cautela con las deudas que todos los sectores de la sociedad y en lo individual se tengan con cualquier organismo financiero.
La cuesta de enero, empieza en este mismo diciembre y los analistas advierten que se alargará enero, febrero, marzo, abril, mayo, junio… del 2016 en un escenario ya cíclico.
Habría que anotar que también las autoridades hacendarias han informado que la recaudación fiscal no podrá sostener el gasto corriente del sector público.
Como se había advertido: con Peña Nieto aún resta lo peor.
Acta Divina… “Hay signos de sobre endeudamiento familiar”, advierte Agustín Carstens, gobernador del Banco de México.
Para advertir… ¿Feliz Navidad?
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