Si no actuamos, nada nos sucederá y
esto es lo peor que puede sucedernos
Nadie sabe lo que el futuro nos reserva.
¿Cuál será nuestra actitud ante el futuro? ¿Cómo conquistaremos la confianza para encararnos con lo inesperado, para realizar los actos necesarios, al sobrevenir los acontecimientos? Estas son las grandes dudas.
Creo que la respuesta a este apremiante problema actual, consiste en sentarnos tranquilamente y tratar de comprender y analizar el mecanismo de nuestros actos.
La mayorÃa de la gente se enreda en una maraña de preocupaciones cuando piensa en el futuro, en la paz, en la situación de los negocios, en la muerte, en los impuestos etcétera. Esto representa para nosotros, una serie de peligros que no nos sentimos capaces de vencer. Ante semejante perspectiva, optamos por la fuga y nos descorazona nuestra incapacidad para hacer frente a la situación.
El miedo es lo único que nos hace mirar el futuro con ansiedad. Y el mejor modo de dominar el miedo es hacer algo, por pequeño que sea. Un paso nos lleva a otro y asà podemos llegar a la meta.
Es un hecho que la persona que se sienta en un rincón y se niega a dar ese primer paso trascendente, nunca hará nada. No es posible ir a un lugar, sin caminar. Nada sucede a un hombre o a una mujer que se niega a correr un riesgo en la vida. La vida sonrÃe a quienes saben asumir riesgos y dar los pasos necesarios.
Recordemos que la persona que es presa del miedo, es como un ser encadenado. Quiere estar a salvo y se imagina que, si no se mueve, no sufrirá daño alguno; pero esa inacción es, precisamente, lo que le perjudica en cada momento de su vida. Se parece a la rigidez del cadaver. El individuo que permanece inmóvil, no comprende el hecho elemental de que la seguridad estriba en el movimiento, que todo lo que vive, puede y debe moverse. Si no lo hace, tarde o temprano, perderá todo cuanto daba valor y plenitud a la vida.
El éxito no llega repentinamente como un rayo. La vida de los grandes hombres y mujeres nos enseña una incontrovertible verdad; todos ellos caminaron paso a paso, lenta, pero firmemente hacia la meta que se fijaron.
Hay que actuar sin vacilar.
¡Cosas veredes, Chonito!
cosasveredes@hotmail.com