Ortega y las presiones para que se vaya

LECTURA POLÍTICA

Noé Mondragón Norato

La batahola crece y se extiende. Y no es para menos, pues se encuentra en juego el gobierno estatal en su fase interina de cinco meses. En este carril, diversos actores se han movido con el fin de llegar a sustituir eventualmente, al actual Rogelio Ortega Martínez. Destacan dos: el ex rector de la UAG y efímero ex secretario general de gobierno, Florentino Cruz Ramírez. Y el senador aguirrista, Sofío Ramírez Hernández. Habría que ubicar algunas vertientes para entender mejor esta inédita dinámica política guerrerense que ya puso nerviosos a muchos actores, que desean permanecer pegados a la rueda del poder.
ORTEGA: JUICIO SUMARIO.- Al gobernador interino le ha llovido muy fuerte en su milpita durante los últimos días. Amagues y fintas para que se vaya, fluyen cotidianamente y por parte de distintos actores. Pero la amenaza más significativa es que sí podría irse del gobierno estatal. Y se lee así: 1.- Los diputados locales están inconformes con el desempeño del mandatario estatal interino. Se asumen excluidos de los beneficios gubernamentales. Aducen ser ignorados por Ortega Martínez. Lo interpretan como “una falta de respeto” al Poder Legislativo. Pero lo que está en juego es en realidad, la negociación soterrada. El precio que cada legislador local le imprime a su voto. Así, trasciende una suma: cada diputado estaría exigiendo cerca de dos millones de pesos a fin de otorgarle un voto de confianza a Ortega Martínez. Y de esta forma, permanezca por lo que resta del periodo de Ángel Aguirre, en el gobierno estatal. Pero olvidan que las arcas gubernamentales están famélicas. Y por ese lado, le están moviendo el tapete. Incrementan la presión sistemáticamente. 2.- Dentro de las propuestas para sustituir eventualmente a Rogelio Ortega, se encuentra el ex rector de la UAG y ex diputado local por el partido Movimiento Ciudadano (MC), Florentino Cruz Ramírez. El asunto es que éste último ya se midió con las presiones gubernamentales. Y no las aguantó. Permaneció escasos dos meses como secretario general de gobierno con Ángel Aguirre. Al final, decidió tirar la toalla. Si las presiones para un gobernante son mucho más intensas que para el funcionario que asume como el segundo de abordo ¿Acaso las aguantará Florentino? ¿O decidirá renunciar como en el pasado, a los dos meses de haber asumido hipotéticamente, el gobierno interino de cinco meses? Así y de entrada, Cruz Ramírez no representa una garantía en el sentido de que hará las cosas bien. Su currículo político es más fuerte y demostrativo, que sus ambiciones personales de poder. Ese es el punto. 3.- El otro aspirante es el senador, Sofío Ramírez Hernández. Le pesa sin embargo, el pertenecer al grupo político del ex gobernador Ángel Aguirre, a quien la tribu los chuchos de NI, excluyó del reparto del poder derivado de los hechos de Iguala, ocurridos el pasado 26 y 27 de septiembre. Pero tiene el consenso de los diputados del PRI, los del MC y algunos del PRD. Su talón de Aquiles es que cuenta con muy escasa experiencia en la administración pública, pues solo ha sido alcalde de su natal Tlalixtaquilla. Como sea, los diputados locales parecen decididos a quitar a Rogelio Ortega, pese a que el abanico de la negociación política parece estarlo abriendo el actual mandatario estatal interino. Y de darse su remoción se jugará otra vez, una parte importante de la gobernabilidad ciudadana que ya se tranquilizó parcialmente en la entidad. 4.- Si se mira bien, cinco meses es muy poco tiempo para observar las virtudes o debilidades de un gobernante. Por ese motivo, existe cierto consenso en el sentido de que Rogelio Ortega debe terminar el periodo de Ángel Aguirre. El punto se liga a la propia dinámica del poder: el que llegue, se dedicará a llenar su propia cartera de billetes, más que a desempeñar un aceptable papel como mandatario estatal. Hincharla de dinero. Es un riesgo latente. Además, Rogelio acaba de empujar un hecho interesante: mediante el diálogo y la negociación, logró que el magisterio disidente agrupado en la Ceteg, desalojara la plaza cívica primer Congreso de Anáhuac. Y trasladara su plantón cerca de las oficinas del ex Ineban, en Chilpancingo. Las presiones políticas sin embargo, fluyen y se incrementan sobre él.
HOJEADAS DE PÁGINAS…La tercera posición en la diputación local plurinominal, fue el precio que el ex diputado local tricolor, Ricardo Moreno Arcos, le puso al PRI de Héctor Astudillo y Manuel Añorve, para no abandonar ese partido y desfondarlo electoralmente en la zona centro. A ver si es cierto…A más de un mes del paro laboral en el Poder Judicial, los inconformes demandan juicio político contra los Magistrados que lo integran. Y todo, porque han ganado su salario íntegro durante todo ese tiempo, sin devengarlo con trabajo. En ese conflicto ya no hay interlocutores. Y así no se resolverá nada.
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