Por Alfredo Guzmán
El voyerista
En Tixtla de Guerrero, si las tendencias que tengo se confirman, el vencedor absoluto de la jornada electoral será el Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Y léase bien lo que escribo.
La jornada electoral fue ayer. Antes de la jornada electoral, el candidato del PRD Hossein Nabor Guillen, tenÃa perdida la batalla. Todas las encuestas que conocÃ, le daban al candidato perdedor, Saúl Nava Astudillo más de 4 puntos de ventaja. Es decir, en una contienda cerrada, ganarÃa el candidato Priista. El mismo cierre del jueves, era un indicativo.
Pero ganó la estrategia del terror del viernes.
Ese dÃa por la tarde, un grupo armado acribilla a varios policÃas comunitarios del barrio del Fortin, asesinando a 4 de ellos.
Si el Partido Revolucionario Institucional (PRI) supuso que matando 4 policÃas comunitarios, podÃa imponer el terror y la gente no saldrÃa a votar, perdió su estrategia.
Si el Partido de la Revolución Democrática (PRD) supuso que con la muerte de 4 policÃas, podrÃa culpar del homicidio al gobierno del estado y al PRI, su estrategia fue exitosa.
La percepción social y lo que la gente cree, es que quien mató a los policÃas fue el gobierno del estado. Sea cierto, o no esto, es lo que la gente piensa.
Por eso, la población castigó al PRI. Una lección más de que los procesos electorales, no terminan, hasta que se conocen los resultados de las urnas, lo de Tixtla, lo confirma.
Lo que sigue ahora, es que las organizaciones polÃticas, reconozcan los resultados electorales. Y a otra cosa mariposa. Es decir, Tixtla, no merece ver a los comunitarios morir, para que ganara cualquier partido polÃtico, pero parece que la perversidad ganó en Guerrero.
Y con el reconocimiento de los resultados, terminen con esta pesadilla en que se ha convertido lamentablemente, todo lo que ocurre en esa población que merece un mejor destino. Lamentablemente, las disputas polÃticas, han hundido a esa productiva población en una crisis terrible, de la que tiene que salir ya.
Tixtla de Guerrero, y sus habitantes, deberán entrar a un proceso de reconciliación que impida que las cosas de la polÃtica, perviertan todo tipo de relación, donde hasta las familias tradicionales y las nuevas, se han enfrascado en disputas palaciegas, que no ayudan ni permiten definir y establecer proyectos productivos de gran aliento.
Creo, que si el ganador, es talentoso e inteligente, independientemente de lo que haya sucedido en esa ciudad y que por ello, haya logrado el triunfo, es necesario conciliar intereses y buscar que se promueva un intercambio de proyectos, que permita promover a Tixtla como una ciudad turÃstica, por la vÃa del reconocimiento de Pueblo Mágico. Eso puede abonar a unificar a la población, en el trabajo de los servicios que otorgarÃan como ciudad. Y la imagen.
Otro serÃa, rescatar a Tixtla, como surtidora de legumbres y hortalizas de la zona centro, que se ha perdido. Pero se deberá hacer una central de abastos, donde se certifiquen los productos, y que se deje de utilizar agua de drenaje para los productos. O sea, que se invierta en separar la presa del Molino, de los drenajes de la ciudad.
Y el otro sueño, serÃa trabajar por drenar y fortalecer la laguna de Tixtla, para que en vez de ser un lastre y un problema, se pueda convertir en atractivo turÃstico. Y por último, el drenaje. Si logran unificarse y fortalecer otros proyectos, Tixtla, podrÃa olvidar los agravios, que ha vivido.