Por Teodoro RenterÃa Arróyave
COMENTARIO A TIEMPO
En el relato histórico de las angustias de las Américas, que en forma precisa hizo el presidente de Cuba, Raúl Castro Ruz, en su discurso en la reunión hemisférica de Panamá, se refirió a esa agresión en constante aumento del gobierno imperial contra los pueblos latinos del Continente. Continuemos:
“La agresión aumentó -afirmó el mandatario-, para luego recordar: Fue en el año 1961 la agresión a Playa Girón, una invasión mercenaria, apadrinada y organizada por Estados Unidos. Seis años de guerra contra grupos armados que en dos ocasiones abarcaron todo el paÃs. No tenÃamos ni un radar, y aviación clandestina -no se sabe de dónde salió-, arrojando armamento en paracaÃdas. Miles de vida nos costó ese proceso; el costo económico no hemos logrado llevarlo con exactitud.
Fue en enero de 1965 cuando concluyó, y lo comenzaron a apoyar a fines de 1959, unos 10 u 11 meses después del triunfo de la Revolución, cuando no habÃamos declarado todavÃa el socialismo, que se declaró en 1961, en el entierro de las vÃctimas de los bombardeos a los aeropuertos el dÃa antes de la invasión. Al dÃa siguiente nuestro pequeño ejército en aquel momento y todo nuestro pueblo fue a combatir esa agresión y cumplió la orden del Jefe de la Revolución de destruirla antes de las 72 horas. Porque si llegan a consolidarse ahà en el lugar del desembarco, que estaba protegido por la más grande ciénaga del Caribe isleño, hubieran trasladado un gobierno ya constituido -con Primer Ministro y el nombramiento de los demás ministros-, que estaba en una base militar norteamericana en la Florida.
Si llegan a consolidar la posición que ocuparon inicialmente, trasladar ese gobierno a Playa Girón era fácil. E inmediatamente la OEA, que ya nos habÃa sancionado por proclamar ideas ajenas al continente, le hubiera dado su reconocimiento. El gobierno constituido en Cuba, basificado en un pedacito de tierra, hubiera pedido ayuda a la OEA y esa ayuda estaba sobre barcos de guerra norteamericanos a tres millas de la costa, que era el lÃmite que entonces existÃa de las aguas territoriales, que como ustedes conocen ahora son 12.
Y la Revolución se siguió fortaleciendo, radicalizándose. Lo otro era renunciar. ¿Qué hubiera pasado? ¿Qué hubiera pasado en Cuba? ¿Cuántos cientos de miles de cubanos hubieran muerto?, porque ya tenÃamos cientos de miles de armamentos ligeros; habÃamos recibido los primeros tanques que no sabÃamos ni manejar bien. La artillerÃa, sabÃamos tirar cañonazos, pero no conocÃamos dónde iban a dar; lo que unos milicianos aprendÃan por la mañana, tenÃan que enseñárselos a los otros por la tarde.
Pero hubo mucho valor, habÃa que ir por un solo itinerario, porque era una ciénaga por donde las tropas no se podÃan desplegar, ni transitar los tanques o vehÃculos pesados. Tuvimos más bajas que los atacantes. Por eso se cumplió la orden de Fidel: liquidarlos antes de las 72 horas.
Y esa misma flota americana fue la que acompañó a esa expedición desde Centroamérica, y estaba ahÃ, desde la costa se veÃan, a solo tres millas algunos de sus barcos.
Periodista y escritor; Presidente del Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo, CONALIPE; Secretario de Desarrollo Social de la Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP; Presidente fundador y vitalicio honorario de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX, y miembro del Consejo Consultivo permanente del Club Primera Plana. Agradeceré sus comentarios y crÃticas en teodoro@libertas.com.mx, teodororenteriaa@gmail.com Nos escuchamos en las frecuencias en toda la República de Libertas Radio. Le invitamos a visitar: www.felap.info, www.ciap-felap.org, www.fapermex.mx, y www.clubprimeraplana.com.mx nos escuchamos en todas las frecuencias de Libertas Comunicación en toda la República